· Familiares se deslindan de su responsabilidad.
René R. Coca/Poderes&Azmedios
Tapachula, Chis; OCT. 08 (interMEDIOS).- Aunque las autoridades del sector salud no se han tomado la molestia de al menos levantar un censo de las personas que sufren de alguna enfermedad mental o adictiva en esta ciudad, la población tapachulteca ha mostrado su preocupación derivado de que estas personas deambulan por todos lados y muchas veces deben ser corridos de las puertas de las casas o comercios debido al mal olor que generan, a la mala imagen de esta gente que andan semidesnudos y a la actitud a veces violenta o depresiva que causa incertidumbre.
Ya sea en las calles céntricas, parques o lugares de mayor conglomeración como mercados e inclusive a las afueras de edificios públicos, se puede percibir a hombres y mujeres víctimas de alguna adicción o afectadas de sus facultades mentales que debido a su abandono denotan condiciones de rechazo entre la sociedad sin que alguna dependencia del Sector Salud haga algo al respecto para al menos responsabilizar a los familiares de los indigentes de su cuidado, y los que carezcan de familiares trasladarlos alguna clínica mental o de rehabilitación.
Comerciantes del primer cuadro de la ciudad como es el caso de la encargada de un conocido restaurante en pleno parque central, señaló que es muy desagradable para los comensales el ingerir sus alimentos y que de pronto aparezca uno o hasta dos indigentes para pedir dinero o simplemente el que pasen y dejen sus olores fétidos en su andar, lo que implica además que los meseros deban estar muy al pendiente para correrlos y que no afecten tanto la imagen como la asepsia que deben tener en el lugar.
De igual forma, los propietarios del comercio formal refirieron que estas personas utilizan la vía pública para hacer sus necesidades fisiológicas, para dormir en las bancas o a las afueras de estos establecimientos, e incluso han llegado a sorprender a estos enfermos en actos de masturbación, por lo que exigieron a las autoridades correspondientes actuar.
A pesar de que el comercio formal ha solicitado la intervención de la Jurisdicción Sanitaria 7 a través de su área de Salud Mental y Adicciones, los entrevistados refirieron que no han tenido respuesta alguna y que se excusan en decir que aquí no existe un hospital psiquiátrico o que muchos de los adictos y enfermos mentales son de Guatemala pero que sus consulados se han desentendido de ellos.
Los comerciantes sugirieron que las autoridades correspondientes deben dar una solución tangible a esta problemática, ya que algunos de los indigentes si tienen familiares pero que no se hacen responsables de los mismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario