sábado, 21 de marzo de 2009

Colonos se quedaron sin luz por falta de pagos

Tapachula, Chiapas 20 de marzo de 2009.- Encabezados por la señora María Magdalena Mújica Calderón, un grupo de habitantes de la colonia Esperanza 2000, que se ubica al suroriente de la ciudad d Tapachula, se manifestaron la mañana de este vienes 20 frente a las instalaciones de la zona Tapachula de Comisión Federal de Electricidad (CFE). De acuerdo con la declaración de la líder de la colonia, lo que buscaban era un diálogo con funcionarios de CFE, ya que un día antes cuadrillas de la empresa les cortaron el suministro de energía eléctrica por falta de pagos, ya que algunos de ellos deben hasta tres recibos. Mújica Calderón dijo que la mayoría de los habitantes de la citada colonia son pobres, con ocupaciones que les reditúan pocos ingresos, como albañiles, recogedores de basura, etc., y que eso ha provocado que no puedan pagar sus servicios como son luz y agua potable, entre otros, además de que les hace falta que les arreglen el drenaje y otros servicios. Indicó que por eso, decidieron acudir a las oficinas de la CFE que se ubican en Solidaridad 2000, con el propósito de llegar a acuerdos que les permita salir de este problema y poder contar con el fluido eléctrico que tanto necesitan. Por parte de la empresa, se indicó que un representante de la misma se trasladó a la colonia referida a fin de conocer de cerca cuál es la verdadera problemática, con el propósito de establecer convenios de pagos con quienes tienen adeudos con CFE y ver la posibilidad de que se les reinstale el suministro de energía eléctrica.
Consejos para evitar sustos en el recibo de la luz
Para evitar pagos muy altos por concepto de consumo de energía eléctrica, es conveniente seguir unos consejos y establecer hábitos muy simples que redundarán en un ahorro notable en los recibos de luz. Un televisor apagado únicamente con el mando o control, consume 15 vatios por hora.
Para evitar este consumo innecesario, es conveniente desconectar el aparato de la toma de corriente. Un hábito común y poco aconsejable, es no apagar las luces cuando se sale de las habitaciones. Los focos incandescentes son los de mayor consumo.
Por eso, hay sustituirlos por lámparas fluorescentes, que son eficientes y ahorradoras de energía eléctrica.
Las lámparas fluorescentes duran 10 veces más que los focos incandescentes y consumen cuatro veces menos energía. Cuando se adquiere un electrodoméstico, es muy importante tener en cuenta su consumo de energía.
Por ello, debe prestar especial atención a la etiqueta energética que se incluye en todos los electrodomésticos cuando quiera decidir su compra.
Hay que ver que el aparato tenga un buen grado de eficiencia energética. A mayor eficiencia, menor consumo. Las lavadoras de bajo consumo ahorran hasta un 70% de agua y un 24% de energía.
Analice los ciclos de lavado que ofrece cada modelo y recuerde la importancia de disponer de un ciclo económico y corto; y la posibilidad de elegir distintas temperaturas de lavado.
Tenga en cuenta que las lavadoras de carga frontal gastan, generalmente, menos energía y agua que las de carga superior.
El 90% del consumo de la lavadora es para calentar el agua.
Utilice un programa de lavado con agua fría o templada, que suele ser suficiente con los detergentes actuales. El refrigerador es el electrodoméstico que más electricidad consume de la casa, en concreto, el 40% de lo que consumen el conjunto de aparatos.
El hielo y la escarcha son aislantes y dificultan el enfriamiento en el interior del frigorífico.
En el mercado hay modelos, los llamados "no-frost", o sin escarcha, que tienen una circulación continua de aire en el interior que evita la formación de hielo y escarcha.
Regule la temperatura del frigorífico según las instrucciones del fabricante. Cada grado centígrado de frío supone el aumento del 5% en consumo de energía.
Mantenga la parte trasera del refrigerador y congelador siempre limpia y ventilada y sitúelos lejos de los focos de calor.
Instalados en malas condiciones pueden consumir hasta un 15% más de energía. No introduzca alimentos calientes en el refrigerador o en el congelador.
Si los deja enfriar fuera, ahorrará energía. Compruebe que su refrigerador cierra herméticamente y no lo abra inútilmente. Unos pocos segundos son suficientes para perder buena parte del frío acumulado.

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