Los reclamos constantes de los comerciantes han provocado discusiones incluso con los mismos policías municipales que poco o nada pueden hacer mas que evitar que haya problemas entre los ciudadanos que buscan deshacerse de sus desechos ante la carencia del servicio de recolección de basura y los comerciantes que se ven afectados por el basurero.
Nadie sabe porque el ayuntamiento de Tapachula, habilitó de manera ilícita el tiradero a cielo abierto, en Ferrocarriles, es un espacio de mas de 50 metros de ancho por casi cien de largo en el que incluso los mismos camiones recolectores dejan los desechos que colectan, lo mismo ocurre con los tricicleros que pagan una cuota que va a dar a los bolsillos de algún funcionario municipal.
Parte de las Toneladas y toneladas de basura que genera diariamente la zona sur van tienen como destino este tiradero urbano ubicado en céntrico lugar y que es un foco de contaminación y aunque los locatarios han pedido su cierre, la autoridad municipal no ha atendido la petición y por el contrario sigue la explotación económica al cobrar la cuota a los tricicleros que diariamente tiran su basura en el lugar.
Los encargados de las dependencias municipales aducen que la mayoría de los camiones recolectores están inservibles y ni siquiera han sido llevados a los talleres para su reparación, por lo que incluso mediante convenios millonarios con empresas particulares que entre otros muchos servicios prestan el de recolección de basura se encuentra ACTOM, que suple en algunos puntos a los camiones municipales.
Sin embargo cuando la población en general sufre la carencia del servicio de recolección de basura, empresas particulares que pagan una cuota especial porque los desechos sean recolectados a las puertas de sus locales, ese servicio no se ha suspendido y se mantiene porque las cuotas presuntamente van a dar a partidas especiales que no ingresan a la tesorería municipal.
Por ello esos comercios y los propios comerciantes no han levantado la voz y es común observar los camiones recolectores y empleados municipales incluso tocando las puertas para recibir la basura, entre otros se encuentran hospitales privados, embotelladoras de refrescos y agua, colegios particulares, farmacias, concesionarias de automóviles, sin dejar de visitar las casas de funcionarios del propio ayuntamiento y otras dependencias federales y estatales.
El otro negocio dentro del rubro de la basura es el de los tricicleros que dan servicio particular de recolección a los hogares estos tienen que pagar una cuota por cada viaje a los servidores públicos, por lo que diariamente cada uno de los casi 500 recolectores que dejan entre 70 y cien pesos diariamente por este concepto que tampoco podría ingresar a la Tesorería Municipal.
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