martes, 4 de diciembre de 2007
Sin límite
Alberto González Martínez
Ingobernabilidad (Primera parte)
Sin saber que seis regidores convocaban a camarógrafos, reporteros y fotógrafos, a una rueda de prensa, Eduardo Reyes Ruiz se hallaba metido de tiempo completo en la organización del festejo que Adolfo Zamora ofrecería a sus seguidores tan pronto el Tribunal Electoral del Estado emitiera el fallo sobre los comicios del 7 de octubre.
Tanto el títere como el titiritero suponían, erróneamente, que el veredicto de los magistrados del Tribunal Electoral sería favorable al perdedor ex candidato del PAN-PANAL y por ello se esmeraban en los preparativos del guateque.
Corría el último viernes de noviembre y los actores se ocupaban en labores diametralmente opuestas: seis regidores se instalaban en la Sala del Cabildo para ofrecer pruebas a la prensa mientras el champion valiente se desestresaba agradando a su titiritero a quien todo le debe, como Titino a Don Neto.
La cita era a las doce y media del día en la planta alta del Palacio Municipal para escuchar a seis de catorce regidores que conforman el Cuerpo Edilicio.
La caja de cristal lucía desolada, un tanto porque decenas de trabajadores laboran por pura inercia, con la zozobra latente por las tropelías que Eduardo Reyes Ruiz y sus compinches, y otro tanto porque el penúltimo mes del año llegaba a su fin y nadie sabía a ciencia cierta si la administración sustituta pagaría sueldos y compensaciones como lo marca la ley.
Recelosos, los empleados municipales desconfían hasta de su propia sombra. Desde que el presidentito fue impuesto por una demencial decisión de la Legislatura Local que ya pasó a mejor vida, ya nadie sabe si trabajar en el ayuntamiento es una suerte o una desgracia.
Por eso el viernes 30 daba la impresión de que no era día de quincena sino un día inhábil en el que unos policías resguardaban el inmueble y dos o tres asesores de cabecera de Eduardo Reyes Ruiz deambulaban por los pasillos de la planta alta, como perros de carnicería, esperando que su graciosa majestad les pidiera algo o, mínimamente, les guiñara un ojo y les destinara una mirada piadosa.
El jolgorio, empero, se localizaba en la Sala del Cabildo, es decir en la esquina suroeste de la Casita de Blanca Nieves, reciente denominación que ahora ostenta el Palacio Municipal de Tapachula desde que el pasado 17 de octubre de este año un célebre grupo de enanos tomara por asalto la administración municipal.
Convertida en una auténtica romería, la Sala del Cabildo lucía llena de cables, cámaras de video y fotografía, grabadoras y libretas de apuntes. Sobre la mesa, los implementos de la raza de prensa se hallaban listos para en cuanto alguno de los regidores rompiera el silencio.
Minutos antes de las 13:00 horas de ese viernes, la voz sonora de Mary Cruz Trejo Lara inundó el salón en que ocurrió la gloria y el infierno de Ángel Barrios Zea.
La primera regidora del cabildo tapachulteco agradeció puntualmente la presencia de reporteros, camarógrafos, fotógrafos, conductores de programas de radio y televisión y uno que otro oreja, de esos que nunca faltan, para bien o para mal.
Y sin tantos trámites soltó lo que la raza de prensa quería escuchar:
“Les hemos invitado a esta rueda de prensa porque queremos decirles que Eduardo Reyes Ruiz miente. El pasado martes, como a estas horas, dijo a la prensa que ahora le sirve incondicionalmente, que ocho regidores debemos a las arcas municipales más de 2 millones y medio de pesos. Eso es una de las más grandes mentiras de Eduardo.
“Como ustedes bien saben, en esa lista hasta aparece el compañero Luis Gómez Manzo, que ahora es diputado local por la zona baja de Tapachula y quien precisamente ayer fijó su posición sobre este lamentable asunto.
“Les quiero decir que minutos después de que Eduardo Reyes Ruiz entregó la lista de los regidores que supuestamente debemos un dineral, personalmente acudí ante Enrique León Baranda, el Tesorero Municipal, para solicitarle que a la mayor brevedad me entregara un informe pormenorizado de mi estado de cuenta como primera regidora del cabildo.
“ Minutos después tenía en mis manos estos documentos, que contienen información extraída del Libro Mayor que los auditores de la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado revisan cuando practican auditorías, misma que a partir de este momento pongo a disposición de ustedes para que la revisen minuciosamente.
“De acuerdo a estos documentos, que me fueron entregados por el Tesorero León Baranda, se puede ver con toda claridad que Mary Cruz Trejo Lara no debe ni un cinco partido por la mitad a las arcas municipales.
“Se prueba y se comprueba que Eduardo Reyes Ruiz miente y que en un acto por demás irresponsable difundió una lista de ocho regidores tan solo para enlodar sus nombres y hacerlos aparecer como sinvergüenzas.
“Con estos documentos, que cada uno de ustedes puede revisar, se demuestra que yo no tengo nada de qué avergonzarme porque no debo nada a la Tesorería Municipal…” expresó la primera regidora con claridad meridiana.
Y efectivamente, cuando el autor de estas letras pudo analizar las hojas que León Baranda entregó a Mary Cruz Trejo, por ningún lado aparecen los 239 mil 576 pesos con 21 centavos que supuestamente adeuda la primera regidora.
Otro detalle por demás relevante que este irreverente columnista pudo apreciar es que la hojita simple en que el valentón Eduardo Reyes Ruiz enlistó a los ocho regidores, incluyendo a Salvador Aceves de la Rosa que ya ni lo es, contrasta con las hojas que León Baranda entregó a Trejo Lara a petición de la última para saber desde cuándo ella debe tantísimo dinero a las arcas municipales.
Luego de la explicación contundente, lapidaria, irrefutable, que Mary Cruz Trejo Lara brindara, tocó el turno a otra regidora, María Amalia Toriello Elorza, que ni siquiera le hacía mucho caso a Eduardo Reyes Ruiz hasta que éste quiso pasarse de lanza portándose con ella como un auténtico barbaján en una sesión de cabildo.
María Amalia Toriello dijo que a ella mucho le extrañaba la actitud que a partir de que lo designaron presidente sustituto ha asumido Eduardo Reyes Ruiz.
“Pero mucho más me indigna que ahora declare a la prensa que yo debo no se cuánto dinero a las arcas municipales y que me incluya en una lista de ocho regidores. Eso no es cierto. ¡Es una gran mentira!
“Precisamente porque no debo nada y tengo la conciencia tranquila, inmediatamente después de que Mary Cruz Trejo acudió con el Tesorero, Enrique León Baranda, yo decidí hacer lo mismo para solicitar una constancia de mi situación en esa dependencia municipal.
“Me acompañaba el regidor Rubén Guízar y a ambos el tesorero nos respondió que primero presentaría su renuncia antes de entregarnos una constancia como la que le solicitábamos.
“Le preguntamos por qué razón se negaba a darnos ese documento que en nuestro carácter de regidores le pedíamos y él nos confió que había recibido órdenes tronantes de Eduardo Reyes Ruiz para que ya no expidiera ningún documento a ningún regidor.
“Ayer, jueves 29 de noviembre, el mismo Enrique León Baranda, el tesorero municipal, nos contestó por escrito a cada uno de los regidores que le solicitamos un estado de cuenta para saber cuánto y por qué debemos.
“Ya él nos contestó, por escrito, que por lo pronto no nos puede entregar ese documento. “Esta es su respuesta:
“Por este conducto, hago de su conocimiento que está en proceso su solicitud, verificando y analizando nuestros registros contables para poderle expedir a la brevedad posible la Carta de No Adeudo que solicita.
“Cabe mencionar, que esto obedece que por ser fin de mes tenemos carga de trabajo relacionada con el pago de las nóminas y las compensaciones del personal de este Municipio.
“Se podrán dar cuenta, entonces, que mientras a la regidora Mary Cruz Trejo Lara le dio la información en cuestión de minutos a nosotros nos la niega porque ya fue regañado severamente por Eduardo Reyes…”, diría María Amalia al concluir su intervención.
En el mismo tono, Octavio Zea González, regidor panista, diría que lo que está haciendo Eduardo Reyes Ruiz es inadmisible. Con un malestar evidente, Zea González agregaría que la actuación del alcalde sustituto no solo es irresponsable sino que tendrá que asumir sus consecuencias porque ellos se reservan el derecho de proceder legalmente en contra del alcalde sustituto por haberlos difamado y acusado sin tener pruebas que documenten sus dichos.
“Estamos valorando todos los hechos y los atropellos que está cometiendo Eduardo y en su oportunidad les diremos cómo vamos a proceder porque no podemos aceptar que nos falte al respeto de esa manera. Si él quiere que nosotros lo respetemos, nosotros le exigimos que nos respete también”, diría visiblemente molesto este regidor.
— ¿Usted se suma a la petición del diputado Luis Gómez Manzo de que Eduardo Reyes Ruiz sea expulsado de las filas del PAN?— preguntaría un reportero a la panista Mary Cruz Trejo Lara.
—No solo me sumo a esa petición. ¡Exijo la expulsión de Eduardo Reyes por haber agraviado de esta manera a los panistas! Por no conducirse como lo marcan nuestros estatutos de Acción Nacional— reviró.
Continuará…
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