Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- 07 MAY.- Activistas, defensores de derechos humanos y organizaciones no gubernamentales preparan una agenda para acompañar desde el sur del país a migrantes centroamericanos en su tránsito por México, luego que el gobierno mexicano determinara llevar a cabo operativos al tren para la contención de la migración, informó el sacerdote Alejandro Solalinde, director del albergue Hermanos en el Camino.
El religioso dijo que este jueves colectivos y organizaciones de defensa de los derechos de los migrantes se reunirán en la ciudad de México, para evaluar que van hacer en favor de los migrantes que a diario cruzan la frontera con México huyendo de la pobreza y violencia de sus países.
“Yo mismo voy a tener que modificar mi agenda, en lugar de aceptar invitaciones dentro y fuera de México, lo que voy a hacer es dedicar más tiempo para caminar con los migrantes y acompañarlos; si no se quieren subir en el tren porque los secuestran y les piden cuotas, entonces quieren caminar y nuestro deber es protegerlos”, dijo.
Solalinde participó como invitado en las actividades de la XIII semana cultural de la diversidad sexual en San Cristóbal de las Casas. En entrevista reveló que mantenía comunicación con la subsecretaria de Población, Migración y Asuntos Religiosos, Mercedes del Carmen Guillen Vicente, pero en días pasados trató de comunicarse con ella y no le contestó, ya no le responde ni los mensajes.
El sacerdote consideró que la reacción de Guillén Vicente y otros funcionarios federales que atienden el tema migratorio es que “acaban de regresar de Estados Unidos y seguramente les jalaron las orejas porque dieron oficio de salida del país a un grupo de 60 migrantes entre niños y mujeres que lograron cruzar la frontera”.
Señaló que ante las presiones de Estados Unidos, la Secretaría de Gobernación reacciona de manera cuadrada y cerrada, sin creatividad para dar otras salidas, porque los migrantes seguirán pasando y contenerlos con operativos “es exponerlos más, ponerlos en jaque y en la boca del lobo con los cárteles y con todo lo que ello significa en el camino”.
Solalinde indicó que el gobierno mexicano sabe que con operativos “no va impedir el flujo migratorio” mientras no exista un plan de desarrollo integral para Mesoamérica, sobre todo para Honduras donde existe un Estado fallido que no cuida ni corresponde para nada a sus connacionales.
El estado de Chiapas, es el paso obligado de miles de centroamericanos y sudamericanos que se internan por la frontera con Guatemala sin documentos migratorios para cruzar el país buscando llegar a Estados Unidos y encontrar un empleo.
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