Tuxtla Gutiérrez, Chiapas., 04 NOV.- Oralia Oropeza Orozco, investigadora del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), definió la región donde se halla el Volcán El Chichonal como una zona de atención prioritaria al existir sistemas ambientales muy frágiles, que deben ser protegidos o conservados.
Expuso que el Chichón –conocido como Chichonal- se caracteriza porque se manifiestan procesos geodinámicos, medio ambientales, además de importantes interacciones sociales, económicas y etnoculturales.
Oropeza Orozco, afirmó que esta región se distingue porque presenta condiciones que la catalogan como una zona de atención prioritaria.
Ttras de dos años de arduo trabajo fue presentado en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), el Atlas de Riesgo: La Región del Volcán Chichón, un espacio potencial para su protección, conservación y desarrollo sustentable.
La zona, detalló la investigadora de la UNAM, tiene un gran potencial para desarrollar el geo turismo, además es un laboratorio viviente que facilita el conocimiento de los alumnos e interesados en la ciencia de la tierra.
“En el Chichón es posible realizar recorridos turísticos, se ha identificado el sitio de lo que podría ser el inicio del recorrido, el parador panorámico, cañadas, la unidad geomorfológica, la estación sismológica y culminar en el cráter del volcán”, detalló.
En presencia de alumnos, autoridades universitarias e investigadores, Oropeza Orozco señaló que al ser una zona con una geo dinámica muy activa, también desencadenada condiciones de “multiamenaza”.
Estas son sismos, vulcanismos, inundaciones, procesos de remoción en masa, erosión de suelos, incendios forestales y degradación ambiental, además, en esta zona predominan comunidades indígenas con altos índices de marginación y pobreza, añadió.
Reconoció que a estas comunidades se les debe apoyar mediante una verdadera planificación integral del territorio, que propicie el desarrollo regional sustentable.
En cuanto a la elaboración del Atlas, mencionó se utilizaron imágenes satelitales, fotografías aéreas y cartografía digital e impresa, información bibliográfica y hemerográfica, diversas bases de datos, observaciones directas, muestreos de suelos y rocas, y entrevistas a la población.
La obra se estructura en cinco secciones, con un total de 122 mapas y sus correspondientes textos explicativos: El espacio natural, indicadores climáticos, geomorfometría, amenazas de origen natural y socio natural y caracterización de la vulnerabilidad socioeconómica.
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