EJECUCIONES; Análisis delictivo en México

Uno de los principios más importantes del análisis delictivo es que solo unas cuantas personas y lugares están involucrados en la mayoría de los eventos delictivos. Este tipo de concentración no es única al delito y el desorden; es prácticamente una ley universal. Una pequeña porción de la superficie de la tierra contiene la mayoría de la vida terrestre. Sólo una reducida proporción de terremotos causa la mayoría de los daños en un temblor. Una pequeña parte de la población acumula la mayoría de la riqueza. Una proporción reducida de oficiales policíacos produce la mayoría de los arrestos. Este fenómeno normalmente se trata como la regla 80–20: 20% de algunas cosas son responsables del 80% de los resultados. En la práctica, raras veces se tiene exactamente esa proporción pero por lo general es un porcentaje reducido de algo o algún grupo involucrado en un alto porcentaje de los resultados. A partir del análisis de la información recopilada hasta el 4 de julio del año 2008, del periódico Reforma respecto de las ejecuciones para los años 2006 a 2008, surgen algunas cuestiones que son importantes destacar. Si aplicamos esta regla y vemos como se comportan algunas entidades respecto de las ejecuciones, encontramos que el 80% de los homicidios se concentran en unas cuantas entidades, tal como se muestra en la siguiente tabla:Mientras que en 2006 se concentraron en 7 entidades, para el año 2007, la concentración tuvo una mayor dispersión ya que aproximadamente el 80% de las ejecuciones se aglutinó en 11 entidades, y en lo que va del año 2008 este tipo de delito se ha venido concentrando en 9 entidades. Sin embargo, para el año 2008 resalta la concentración que se tiene en sólo dos entidades del país: Chihuahua y Sinaloa donde se juntan casi el 42% de las ejecuciones. Chihuahua pasó de ocupar la séptima posición en el año 2006, con 130 ejecuciones que representaron el 6.1% del total de ejecuciones del país, a la posición número cinco en 2007, con 154 ejecuciones —el 6.5% de las que se cometieron en ese año—, y durante 2008 se encuentra en primer lugar y con una concentración importante, ya que se han cometido 29.3%, es decir, 587 de las 2,002 ejecuciones totales que van hasta este momento. Para el caso de Sinaloa, puede señalarse que, aunque esta entidad ha permanecido entre las dos primeras posiciones en los tres años, con 350 ejecuciones en 2006, 346 en 2007 y 247 en lo que va de 2008, su participación relativa ha permanecido más o menos constante. Un caso interesante es el que se presenta en Michoacán ya que dicha entidad pasó de la primera posición en 2006, con 543 ejecuciones que representaron casi el 26% de las ejecuciones que se dieron en el país en ese año (poco mas de 1 por cada 4) a la séptima posición en 2008, donde se están dando menos de cinco ejecuciones por cada 100 que se cometen en el país. Entonces cabe preguntarse qué condiciones socio demográficas había en Michoacán en 2006 de tal forma que ahí se concentraba el grueso de las ejecuciones del país y qué cambios se dieron o qué acciones se tomaron de tal forma que, aun cuando permanece entre las que tienen el mayor número de ejecuciones, su descenso ha sido considerable. Lo mismo ocurre con Chihuahua. ¿Qué pasó y qué se dejó de hacer, de tal manera que las ejecuciones se han concentrado en esta entidad?. ¿Qué motivó a que las ejecuciones pasaran de 147 en 2007 a 587 en lo que va del año 2008? Independientemente de la concentración que se está dando actualmente, donde ya señalábamos que las ejecuciones hasta el momento se han concentrado en 9 entidades federativas que se muestran en la tabla anterior, en 9 de éstas, Baja California (pasó de 154 en 2007, a 161 en 2008), Chiapas (de 12 a 14), Chihuahua (de 147 a 587), Coahuila (de 29 a 45), Estado de México (de 111 a 144), Oaxaca (de 33 a 39), Puebla (de 2 a 3), San Luis Potosí (de 13 a 14) y Yucatán (de 1 a 4). Es importante observar que sólo tres de las nueve entidades cuyas ejecuciones han aumentado en lo que va del año 2008 con respecto a las que se dieron en 2007, están en la tabla que muestra el nivel de concentración de las ejecuciones para el año 2008: Baja California, Chihuahua y Estado de México. Si las cosas se siguen dando como hasta el momento suceden, antes de finalizar julio, habremos superado el número de ejecuciones que se dieron el año pasado, ya que hasta el 4 de julio llevábamos 2002, contra las 2,270 que se dieron en todo el año 2007. Este cálculo se realiza en virtud de que en los últimos días se están cometiendo entre 12 y 20 ejecuciones diarias.